TIJUANA, BC A 8 DE MAYO DE 2021.- A petición de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), el sentenciado por el asesinato del candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio Murrieta, Mario Aburto Martínez será trasladado al centro de readaptación social de El Hongo, en Baja California.
La CNDH, a través de un comunicado oficial de prensa, confirmó que el Comisionado del Órgano Administrativo de Prevención y Readaptación Social (OADPRS), José Ángel Ávila Pérez, aceptó la solicitud de medidas cautelares para quien actualmente se encuentra interno en un penal de Guanajuato.
El 7 de mayo por la tarde la CNDH hizo publica su solicitud de medidas cautelares, siendo la principal el inmediato traslado de Aburto a un penal más cercano a su familia, dado a que la mayoría residen en parte de Baja California y sur de California, en Estados Unidos.
La CNDH expuso que estas medidas correspondían a “salvaguardar la vida, seguridad, integridad física, a no ser víctima de actos crueles, inhumanos y/o degradantes, a la no discriminación, y a la salud física, psíquica y emocional, así como a la calidad de vida en reclusión”.
De acuerdo con el documento la CNDH recibió a principios de este año una queja por parte de Rubén Aburto Martínez, quien se identificó como hermano de Mario, en la cual expuso que el penal “no le proporcionan alimentos, ni atención médica, encontrándose muy débil”, en enero de este año lo habrían reubicado de penal tras superar una infección por COVID-19.
El hermano agregó en su queja que “durante el gobierno del presidente Carlos Salinas de Gortari y con motivo del asesinato de Luis Donaldo Colosio, en 1994, su hermano fue encarcelado y torturado, por lo que cada año en el mes de marzo es víctima de actos de tortura por los hechos que se le imputan”.
El organismo acudió al penal en cuestión para entrevistarse con Aburto Martínez, proceso en el cual verificaron que no hay separación entre procesados y sentenciados. También recabaron el testimonio del recluso, mismo que señaló los malos tratos a los que vive sujeto por parte de otros internos, así como del personal del centro.
A raíz de esto se solicitaron ciertas medidas cautelares, en una segunda entrevista realizada en el mes de febrero, Aburto le aseguró al organismo que sus condiciones de vida dentro del penal habrían cambiado, pero seguía pendiente su traslado a un penal más cercano a sus familiares.
Aún no se ha revelado en que momento se hará efectivo el traslado de Aburto a la entidad, la CNDH aseguró que el expediente derivado de esta queja continua en integración.