Por Octavio Fabela Ballinas
TIJUANA, BC A 21 DE JUNIO 2021.- Las personas migrantes que se mantienen en el campamento de El Chaparral amontonaron las casas de campaña frente a la explanada del cruce internacional y ahora se quejan por la falta de servicios sanitarios y agua potable.
Esto sucedió luego del desalojo que el sábado 18 de junio agentes de la Policía Municipal realizaron sobre la calle profesor José María Larroque.
Molestias entre vecinos que viven cerca del campamento y del personal del Sistema de Administración Tributaria fueron lo que provocaron el desalojo, “como no tienen baño, hacían sus necesidades frente a la casa, por lo que todas las mañanas teníamos que lavar y al rato estaba igual”, señaló una de las vecinas afectadas que pidió el anonimato.
Silvestre Rodríguez, uno de los migrantes acampados en El Chaparral, explicó que sin aviso, los servicios sanitarios fueron retirados, además, un contenedor para agua potable que era llenado todos los días, se encuentra vacío desde el viernes.
“Seamos de donde seamos todos somos humanos” exclamó Don Silvestre, hombre de la tercera edad originario de Guatemala.
“Ya nos quitaron los baños, ya no hay ni agua” lamentó; por su parte, una mujer michoacana que asegura tener dos meses en el campamento reclamó la poca higiene que hay en el lugar, “no tenemos agua ni para lavarnos las manos; solo hay una llave de la que cada vez sale menos agua y es insuficiente para toda la gente que hay aquí”.
Hasta hoy, la autoridad responsable de la atención a los migrantes no ha informado sobre la suerte que correrán las personas del campamento; tampoco han presentado el censo de cuántos son.
La Secretaría de Salud estima que en ese lugar viven 2 mil 500 personas en condiciones insalubres; para atenderlos ha realizado 8 mil consultas médicas.