Por: Octavio Fabela Ballinas
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 9 DE AGOSTO DE 2021.- El pastor a cargo del albergue Ágape, Albert Rivera, presentó una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en contra de un teniente de la Guardia Nacional por no atender el botón de pánico que le entregó la Secretaría de Gobernación, luego de que cuatro sujetos armados ingresaran a este refugio en búsqueda de migrantes.
Explicó que el suceso se registro la tarde del pasado miércoles dos de agosto en albergue migrante Ágape, donde cuatro sujetos armados ingresaron con la intención, presuntamente de sustraer a personas recién llegadas a esta frontera y que no se encontraban en el lugar.
Agregó que a pesar de contar con un botón de pánico, entregado por la Secretaría de Gobernación, la Guardia Nacional tardó 3 días en atender la alerta de riesgo, aunque de la central telefónica le llamaban cada media hora para monitorear su ubicación, lo cual genera una condición de vulnberabilidad no sólo a este albergue, sino a todos los demás.
El activista y varios de los migrantes testigos de los hechos acudieron ante la CNDH para denunciar la falta de atención de uno de los mandos de la Guardia Nacional a quien se le asignó atender el caso, así como de la Policía Municipal, ya que a pesar de que elementos de esta ultima corporación acuden en tres ocasiones durante el día, dijeron no tener conocimiento de la llamada de alerta, ni de los hechos.
Agregó que buscará una reunión en la Secretaría de Gobernación para exponer la falta de coordinación que hay entre las autoridades y la infuncionalidad del botón de pánico que se le entregó como parte del protocólo de protección a defensores de derechos humanos y periodistas.
Uno de los responsables del albergue migrante Ágape confirmó que fueron cuatro las personas que ingresaron al lugar el pasado miércoles con la intención de extraer a una persona que fue desplazada desde su lugar de origen.
Narró que pese al incidente, es la primera vez que sucede y que la población albergada no teme por su seguridad o su vida, aunque el Pastor Riverra considera que la situación es de riesgo y de vulnerabilidad.