Por Octavio Fabela Ballinas
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 8 DE AGOSTO DE 2021.- Casi la totalidad de las 89 mil personas pertenecientes a alguna de las comunidades originarias del País que viven en Tijuana viven en condiciones de pobreza extrema, sin recibir los servicios básicos y unas 200 de ellas son desplazadas de las zonas de Chiapas en su mayoría mujeres que se ganan la vida pidiendo dádivas en los cruceros.
El Censo de Población y Vivienda arrojó que en Baja California habitan 234 mil personas el 38 por ciento de ellas asentadas en Tijuana, explicó la coordinadora de Atención a Pueblos Originarios, Lourdes Martínez Ramírez, quien refirió que en el último año se ha notado la llegada de comunidades purépechas, tzotzil, mam y zoques, desplazados de los estados de Michoacán y la sierra de Chiapas.
“El 9 de agosto se conmemora el Día Internacional de los Pueblos Indígenas, para nosotros es importante visibilizar los problemas que enfrenta la comunidad de los pueblos originarios porque la mayoría de esas personas llegan a Tijuana y debido a que son monolingües, enfrentan problemas para la adaptación”, dijo.
Entre los problemas que enfrentan las comunidades indígenas en la ciudad, está el deficiente acceso al servicio de agua potable, la falta de drenaje en los lugares en los que se asientan y el alumbrado público, también la mayoría de ellos llegan sin un documento de identidad ni acta de nacimiento lo que les impide gozar de educación y acceso a los servicios de salud.
Entre los últimos grupos que han llegado a la ciudad, está el de mujeres con hijos de las comunidades tzotzil, mam y zoques, a ellas es común verlas en los cruceros haciendo malabares y pidiendo dinero “fueron desplazadas de sus tierras, no tuvieron opción porque si se quedaban las mataban” asegura la funcionaria municipal.
Explicó que aunque la autoridad a través de las coordinaciones de Atención a Pueblos Originarios y la de Atención al Migrante, han intentado acercarse a ellas para ayudarlas “en cuanto nos ven corren, tienen miedo”, pese a que no existe un censo de la cantidad de estas personas, estima que son unas 200 las que están en esa situación.