Por Korina Sánchez S.
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 26 DE OCTUBRE DE 2021.- La mitad de las familias en Baja California sufren violencia familiar, sin embargo, es Tecate el municipio que tiene la mayor incidencia, afirmó el presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública del Estado (CCSPE), Juan Manuel Hernández Niebla.
De acuerdo con el estudio sobre violencia familiar en el estado, realizado por la empresa Explora, la violencia en los hogares creció de septiembre de 2020 al mismo mes de 2021.
“Por tasa de 100 mil habitantes, en términos de feminicidio es Tijuana el primer lugar, en término de violencia familiar Tecate, en término de violación Ensenada y en término de lesiones Mexicali”.
El 57.2 por ciento de las familias en Baja California consideran que la violencia aumentó derivado a la pandemia del Covid-19: un 74.3 por ciento en Mexicali, 59.8 por ciento en Tijuana, 36.5 por ciento en Ensenada, 36 y 40.6 por ciento en Tecate y Playas de Rosarito, respectivamente.
La causa principal de la violencia es el estrés. Los problemas económicos, el consumo de alcohol y drogas le acompañan, para que las parejas y padres e hijos sean violentados.
“Es tan importante la víctima como el victimario, hay que voltear a ver al victimario de igual manera porque traemos un problema en potencia que es lo que termina explotando”.
El estudio de Explora, presentado por el CCSPE indica que el tipo de violencia más común es la verbal, con un 60.1 por ciento de los casos; sigue la económica, física, psicológica y sexual.
Y en el 20.9 por ciento de los casos el victimario es el padre, que en ocasiones se encontraba bajo efectos del alcohol durante el acto de violencia, en un 14.7; el 12.1 por ciento de los victimarios estaban drogados y el 6.4 por ciento combinaron las sustancias.
Baja California tiene el primer lugar a nivel nacional con el mayor número de llamadas de emergencia por casos de violencia entre parejas, precisó.
“Esto nos viene a decir que prácticamente en materia de violencia familiar, la incidencia delictiva tiene un comportamiento exactamente igual que el resto de los delitos. Está esparcida en todo es el estado”.
La coordinación entre las autoridades para atender el tema es un pendiente, a juicio de Hernández Niebla. Se debe trabajar en un proyecto a largo plazo para tener resultados positivos.
“Vemos poco esfuerzo por parte de los municipios, por lo menos de las administraciones que acaban de cerrar, digamos que darle la duda a las administraciones que están llegando”.
En la entidad se denuncia el 16.8 por ciento de los incidentes de violencia familiar, mientras que la cifra negra es del 83 por ciento, es decir, no se actúa al respecto.
