Por: Adán Mondragón
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA A 28 DE DICIEMBRE DE 2021.- En la víspera navideña los diputados de Baja California tuvieron una sesión “maratónica” en la que aprobaron la Ley de Ingresos para el estado, la tabla de valores catastrales de los Ayuntamientos y el Presupuesto de Egresos de los organismos “autónomos”, estado y municipios.
Y sí, prepare el bolsillo porque habrá aumentos en el predial, las tarifas del agua y alguno que otro pago de derechos; había inquietud por saber si las cartas de antecedentes no penales, serían gratuitas, pues no, se seguirán cobrando.
En el ayuntamiento donde se dice habrá una mayor alza en el predial, por el aumento del 17.5 % sobre el valor de la construcción, es en Ensenada, seguramente habrá fuertes reclamos al alcalde Armando Ayala, quien proponía que el aumento fuera del 30%.
La Ley de Ingresos de Mexicali, que incluye el pago de 15 pesos por derecho de alumbrado público generó la inconformidad de la fracción de diputados de Acción Nacional, porque consideran anticonstitucional el cobro del DAP.
Mientras que en la discusión de la Ley de Ingresos de Tijuana, la fracción del PES y del PAN se manifestó con contra porque dicha propuesta contempla un aumento al predial que va por encima de la inflación.
Este 27 de diciembre en una sesión extraordinaria del congreso local, por unanimidad se aprobó una reforma a diversos artículos de la Ley de Seguridad Pública del Estado, Ley Orgánica de la Fiscalía General y la Ley que crea la Comisión Estatal del Sistema Penitenciario de Baja California.
Recordar que a partir del 1 de enero entra en operaciones la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Baja California, luego de que el morenista Jaime Bonilla Valdez, desapareciera la dependencia y creara una “súper fiscalía” en la que con el aval de los diputados de la 23 legislatura nombraron a su compadre, Guillermo Ruiz Hernández, titular de la dependencia.
La reforma en materia de seguridad, deja ver que la gobernadora Marina del Pilar está dispuesta a encarar la situación de inseguridad que se vive en Baja California, ya que su antecesor se cruzó de brazos y se dedicó a hacer negocios desde su encargo.