Por: Gabriela Martínez
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA A 28 DE MARZO DE 2022.- Colonias como Camino Verde y Natura en Tijuana ocupan el primer y segundo lugar, respectivamente, con más reportes de violencia contra la mujer lamentó la directora del Centro de Justicia para la Mujer (CEJUM), Magdalena Bautista.
En entrevista para Esquina Informativa, la funcionaria explicó que el Centro de Justicia fue habilitado justo en una de esas dos demarcaciones: Camino Verde. El origen de esa decisión fue para mantenerse en uno de los focos rojos en cuanto a violencia general, pero también agresiones contra las mujeres.
“Estamos en la colonia que tiene mayores índices de violencia, estamos en el epicentro, pero es un área de oportunidad… hemos hecho mucho esfuerzo porque ante el desconocimiento de que existe un espacio como el centro de justicia hemos trabajado con la comunidad para dar a conocer los servicios que estamos ofreciendo”, indicó.
La intención es mantener la cercanía con las víctimas para darles las herramientas y la atención que necesitan al alcance de sus manos, ya que algunas de las mujeres no presentan quejas o denuncias porque están limitadas por sus agresores física y económicamente.
Detalló que en 2021 el Centro de Justicia para la Mujer atendió a 307 mujeres, sin embargo, desde noviembre hasta febrero el número de atenciones alcanzó las 331, de ellas 137 llegaron por primera vez y el resto se trata de casos a los que les dan continuidad.
De las más de 300 intervenciones en lo que va de esta administración en 142 casos las víctimas presentaron denuncias penales y siete resultaron en demandas familiares.
En días pasados una organización civil denunció públicamente que una menor que quiso acercarse al centro para denunciar que había sido víctima de abuso no recibió atención porque al ser fin de semana no había personal para atenderla.
Al respecto, dijo que activaron un programa de trabajo de 24 horas siete días a la semana para que al menos haya una persona en todo momento para atender situaciones de emergencia, pero aún trabajan en la conformación de un grupo –integrado por una abogada, una trabajadora social y un terapeuta- para que sea una unidad de reacción quien atienda.