Por: Adán Mondragón
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA A 26 DE ABRIL DE 2022.- Luego de tres años de gobiernos de la “cuatro te” en Baja California, parece que la violencia, ejecuciones, comienzan a disminuir en la entidad.
En el primer trimestre de 2020, cuando Jaime Bonilla Valdez, comenzaba su gobierno en el Estado se cometieron 640 asesinatos.
Sin embargo, en los primeros tres meses del segundo y último año de gobierno de Bonilla Valdez, fueron 816 las víctimas de homicidio doloso.
Ahora, este primer trimestre de 2022, la cifra disminuyó a 593 asesinatos, es decir, 27.3% menos que el mismo periodo de 2021 y 7.3 % menos que en 2020.
El exgobernador Jaime Bonilla Valdez, hoy Senador de la República creó una “súper Fiscalía”, -en la que colocó a su compadre Guillermo “Titi” Ruíz- a la que le asignaron labores de “seguridad y prevención del delito”.
En su momento, los “morenistas” del estado confiaron en el nuevo modelo y estrategia de seguridad, aunque los más conocedores del tema no vieron con buenos ojos esta modificación.
Las cifras ahí están y nos hacen saber que fallaron las estrategias para contener la comisión de delitos de alto impacto, en este caso, los asesinatos.
Con el arribo de Marina del Pilar Avila Olmeda, a la gubernatura, se creó la Secretaría de Seguridad Ciudadana y con ello, también hubo un cambio en la estrategia.
La morenista puede presumir que hay una disminución en la cifra de asesinatos, es evidente el apoyo de la federación y de las fuerzas armadas.
Lo cierto es que aún estamos lejos de los “buenos” años en la entidad, cuando no se rebasaba el millar de asesinatos durante el año.