Tiro de Esquina: Coordínense señoras, nada más, coordínense

Por: Octavio Fabela

TIJUANA, BAJA CALIFORNIA A 22 DE JUNIO DE 2022.- Este miércoles una vez más las agendas de la gobernadora María del Pilar Ávila y la alcaldesa Montserrat Caballero nos muestran que la coordinación solo se da en el discurso, a la misma hora y casi en el mismo lugar las gobernantes estarán participando en dos actos públicos, eso sí, sin revolverse y con la suficiente distancia de per medio.

Ya la semana pasada, luego de una ausencia pública de más de diez días, la alcaldesa apareció y amagó con romper con el convenio de colaboración en materia de seguridad pública que el ayuntamiento signó con el gobierno estatal y todo porque su hermano fue detenido en una revisión que realizaban oficiales de la Fuerza Estatal de Seguridad.

Además del asunto de seguridad, la ciudad tiene un grave problema de movilidad que deben atender de forma conjunta y coordinada las dos entidades de gobierno, estado y municipio, pero pareciera que cada uno está haciendo esfuerzos aislados y por eso es por lo que no se alcanzan resultados palpables para los ciudadanos.

Pongamos por ejemplo el sistema de transporte público, la alcaldesa decidió junto con su cabildo retirar la multa para quienes utilizan el carril confinado al Sistema Integral del Transporte, pero no ajustó a los transportistas para que circulen por un solo carril y dejen de ser parte de caos vehicular que se vive todo el día a todas horas.

El Instituto de Movilidad Sustentable, por su parte, intenta poner orden entre los miles de vehículos de alquiler de todas las modalidades que circulan en la ciudad, eso sí, cada quién hace sus esfuerzos por su lado, y en esa dinámica la percepción y lo que sucede diariamente en las calles y el servicio que reciben los que pagan sigue siendo malo y caótico.

En los últimos 30 años no me ha tocado ver, y todo indica que no lo veré en el corto plazo, que la Comisión Estatal de Servicios Públicos y el gobierno de la ciudad trabajen de manera coordinada para que las obras de la paraestatal se realicen de manera conjunta con lo que necesite el gobierno de la ciudad y no se conviertan en un problema más que en una solución.

Y podríamos seguir con la lista de ejemplos en los que es necesario que quienes encabezan cada una de las entidades gubernamentales se coordinen y trabajen en un solo sentido para lograr que los ciudadanos percibamos que se avanza en alcanzar la calidad de vida a la que todos tenemos derecho.

La descoordinación que existe entre los gobiernos municipal y estatal es una segunda versión de la que los ciudadanos padecimos cuando Jaime Bonilla Valdés, entonces gobernador de Baja California, sostuvo con Arturo González Cruz en su momento presidente del XXIII Ayuntamiento de Tijuana.

Es la misma situación, solo que ahora sin los insultos personalizados que en su momento se lanzaban los señores; esta vez las señoras dicen llevarse bien y de vez en cuando se dejan fotografiar juntas formando un corazón con las manos, pero en la práctica están igual o más distantes que sus antecesores.

Y hablo solo de la coordinación para trabajar porque si nos vamos poquito más atrás, también tenemos el caso de los alegres compadres Francisco Arturo Vega de la Madrid y Juan Manuel Gastélum Buenrostro, que se llevaban de maravilla y ya ven, se entendían tan, pero tan bien, que terminaron en una casi asociación delictuosa de la que los dos se beneficiaron en lo personal y los ciudadanos quedamos relegados.