Por: Lourdes Loza Romero
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA A 11 DE AGOSTO DE 2022.- Las dos armas relacionadas al atentado que sufrió una mujer en la Zona Norte en septiembre de 2018, coincidieron con las utilizadas en otros hechos violentos ocurridos el mismo año, de acuerdo al testimonio vertido por uno de los peritos que testificó en el debate de juicio oral que se realiza esta semana.
Fueron dos pistolas las relacionadas a este caso, una de calibre .9 milímetros y la otra de .40 milímetros, de acuerdo con las pruebas de balísticas que realizó el perito se encontraron coincidencias con otros hechos delictivos registrados ese mismo año. La de .9 milímetros coincidió con dos asuntos y la de .40 con tres más.
Uno de los imputados identificado como Daniel fue señalado por la víctima como el portador del arma de .40 milímetros, color café con verde, que disparó en por los menos cinco ocasiones en su contra cuando salía del domicilio de una familiar, la tarde del 10 de septiembre de 2018.
La mujer, quien desde el mes de marzo de ese mismo año buscaba a una hermana desaparecida, resultó con tres heridas, de acuerdo a la información proporcionada por el perito médico que le realizó un certificado de integridad cuando estuvo internada en el Hospital General de Tijuana a consecuencia del ataque.
Las heridas fueron en un codo, en la espalda y en el abdomen. El médico comentó que la herida del abdomen fue la que más comprometió su salud, por los órganos vitales que ahí se encuentran, pero que ninguno se vio afectado de gravedad.
En el segundo día de debate se presentó una controversia, debido a que uno de los agentes investigadores fue asesinado en enero de 2021 en un operativo realizado en la ciudad de Ensenada, por lo que el material que recabó al respecto del caso en cuestión fue incorporado por la propia Fiscalía, a lo que se opuso la defensa particular de los tres imputados y se tuvo que hacer un receso para que la Jueza deliberaba si se incluía o no.
En el tercer día de debate surgió una nueva controversia, luego de que una agente del laboratorio químico de la Fiscalía dio su testimonio sobre la prueba de rodizonato de sodio, la cual se utiliza para confirmar si una persona disparó un arma de fuego. La perito habló de que existe un documento en el cual el imputado otorgó su consentimiento para que se le realizará dicha prueba, documento que la defensa exigió fuera presentada en el juicio a pesar de que la Fiscalía no la incluyó en el desfile de evidencias. Esto provocó un nuevo receso y más confrontaciones entre los participantes.
El juicio fue aplazado para que la Fiscalía pueda presentar el documento en cuestión y también para que sea posible la localización de su último testigo, un policía municipal que realizó la detención de uno de los imputados y que a la fecha no se ha presentado a rendir su testimonio por encontrarse en una incapacidad médica desde el pasado mes de julio.
