Por: Octavio Fabela Ballinas
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA A 1 DE AGOSTO DE 2022.- La última vez que la señora Yessenia Gálvez vio a su hijo Ismael fue la tarde del sábado. Le avisó que iría a casa de un amigo a una fiesta y salió de casa, la siguiente noticia que escuchó fue la mañana del domingo cuando su otro hijo le llamó por teléfono y simplemente gritó: ¡Me mataron a Mayel!.. ¡Me mataron a Mayel!
Afuera de la Fiscalía General del Estado (FGE), la señora Yesenia esperó que su hijo, testigo presencial del homicidio de Ismael saliera de rendir su declaración ministerial. Lamentó que la autoridad no le informe nada de lo que sucedió con su hijo de 26 años, que trabajaba en una fábrica de productos de limpieza.
“No nos dicen nada, los que están investigando son ellos (su hijo y otros amigos) yo no sé qué pasó”, dijo en entrevista la señora Yesenia, quien explicó que su nieta, hija de Ismael ya sabe que su padre falleció y cuando recibió la noticia lloró mucho, además de que aseguró no explicarse “¿Qué corazón puede tener la mujer que hizo eso?”.
Aclaró que hasta el momento, ni los amigos con los que salió su hijo la noche del sábado han hablado con ella, para explicarle qué es exactamente lo que ocurrió. Ismael de 26 años era originario de Los Mochis, Sinaloa. Su familia lo trajo a vivir en Tijuana cuando tenía tres años. Le sobrevive una hija y su esposa.
