La motorización en Tijuana superó la infraestructura urbana
Recursos por la regularización de autos deben etiquetarse para mejorar transporte e infraestructura peatonal
Por: Octavio Fabela Ballinas
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 30 DE JUNIO DE 2023.- La facilidad con la que los ciudadanos de la frontera norte del país pueden adquirir un vehículo ha provocado que la motorización en ciudades como Tijuana haya rebasado la capacidad de la infraestructura vial, generando problemas de movilidad y accidentes.
Álvaro Lomelí Covarrubias, coordinador general de Desarrollo Metropolitano y Movilidad en la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, explicó que esto se debe a que mientras la población creció al 1.2 por ciento, los vehículos aumentaron en un 5 por ciento.
En el marco del foro ciudadano “A vuelta de rueda” organizado por los grupos Madrugadores y 21 de Tijuana, el funcionario federal destacó que con la Estrategia Nacional de Movilidad el gobierno federal le apuesta a que en los próximos 25 años se pueda revertir la motorización en las ciudades del país.
Precisó que el tema de movilidad está ligado con el desarrollo urbano, por lo que es necesario que las autoridades en materia de transporte articulen adecuadamente los sistemas de transporte público para evitar que los ciudadanos tengan la necesidad de utilizar su automóvil.
“Seguir con la misma tendencia de motorización no es la solución, se necesitan sistemas de transporte más eficientes y de mayor calidad que sean un atractivo para la ciudadanía”, dijo con lo que también se reducirá el número de accidentes.
Entre 2018 y 2021, Tijuana reportó un total de mil 618 accidentes que involucraron motocicletas, el 56.77% de los acontecimientos en el Estado, según datos del Inegi en su estudio “Accidentes de tránsito terrestre en zonas urbanas y suburbanas”, por lo que es importante revertir esta situación.
Explicó que la regularización de los autos llamados “chocolate” solo provoca que se incremente el número de vehículos, por lo que consideró que parte de los ingresos que se obtienen por este trámite deben de etiquetarse para mejorar las condiciones del transporte público y la infraestructura peatonal.
El estar en un proceso de regularización constante es lo que provoca que el número siga incrementando sin cumplir con algunas Normas Oficiales Mexicanas, por lo que el recurso que se capta en ese proceso se debería etiquetar para mejorar las condiciones de movilidad, ya sea en el transporte público o infraestructura peatonal, concluyó.