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TIRO DE ESQUINA. La educación es pedagogía no política

Por: Octavio Fabela Ballinas

TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 10 DE AGOSTO DE 2023.- El debate sobre la conveniencia o no del contenido de los libros de texto gratuitos ha dejado de lado a los especialistas en pedagogía y se han subido al cuadrilátero políticos, así como a otros sectores cuya actividad es ajena a la acción de enseñar en las escuelas.

Desde enero de 1960, día que se entregó el primer juego de libros de texto gratuitos, su contenido se ha modificado en cuatro ocasiones: en 1972, 1993, 2000 y ahora en 2023. Todas las modificaciones respondieron a reformas curriculares en la educación básica.

El debate sobre si están elaborados correctamente a omitido la opinión de los propios profesores, de los alumnos de los grados superiores y, por el contrario, lo han encabezado los partidos políticos que nada tienen que hacer en el ámbito académico.

Hablar del material didáctico que se entregará en las escuelas se ha convertido en los últimos días en el tema de interés para quienes gustan aprovechar los reflectores para hacerse promoción; en este grupo se debe incluir al presidente de la República.

Quienes ya se dieron el tiempo de leer los libros que recibirán los niños a finales de este mes señalan principalmente que en ellos se vierte ideología política, y muestran pasajes dónde es claro que si se pretende enseñar que el sistema que pretende imponer el gobierno actual es el único.

Más allá de esas consideraciones, lo demás que se habla de los contenidos es sólo política; tan es así que al presidente se le olvida que la violencia no se ha contenido y que siguen desapareciendo personas todos los días, sin que su gobierno encuentre una ruta de solución para estos dos problemas que aquejan a los mexicanos.

Para el presidente López Obrador es más fácil despotricar contra sus adversarios políticos con el argumento de los libros de texto; desde que surgió ese tema el resto de las complicaciones del país se han archivado, nadie habla de ellas y pierde mucho tiempo en justificar lo que los expertos de dicen que hizo mal.

Al final de todo este debate estéril, quienes serán los verdaderamente afectados son los niños que regresarán a la escuela en las próximas semanas. De las autoridades locales mejor ni hablar, ellas solo replican lo que el presidente les ordena.