Por: Octavio Fabela Ballinas.
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 14 DE SEPTIEMBRE DE 2023.- Una vez más se han formado campamentos entre los muros que los Estados Unidos levantó para resguardar su frontera con México; los migrantes se colocan en una zona conocida para esperar que los procese la Patrulla Fronteriza.
Para las autoridades, es la desesperación la que los impulsa a buscar la vía ilegal de cruce hacia los Estados Unidos, pero activistas tienen una visión distinta y sostienen que lo que los lleva a contratar los servicios de un guía es el miedo.
Para nadie es un secreto que en Tijuana operan al menos tres bandas de criminales que tienen presencia en todo el país, muchos de los migrantes que huyen desplazados para salvar su vida, saben que los delincuentes tienen presencia en la ciudad.
En Michoacán, Oaxaca y Guerrero, existe la presencia principalmente del Cartel Jalisco Nueva Generación, banda criminal que también opera en Baja California según lo reconocen las autoridades de seguridad.
Tres meses resulta mucho tiempo para que quienes huyen de ese grupo criminal sean ubicados en la ciudad, algunos desplazados aseguran que han recibido mensajes en los que se menciona su ubicación actual de parte de quienes los persiguieron en su lugar de origen.
Es el temor de volver a vivir el infierno que soportaron antes de dejar todo y salir en busca de paz y tranquilidad para ellos y sus familias es lo que los impulsa a cruzar de forma ilegal la frontera en vez de esperar la anhelada cita mediante la aplicación CBP-One.
Aunque están precedidas de muertes y desapariciones, muchas familias saben que no podrán tener el privilegio de una atención expedita por el gobierno de Estados Unidos, por eso se arriesgan con todo y niños a brincar el muro y esperar en territorio norteamericano.
Hay quienes si lo hacen por mera desesperación, pero que personas esperen entre los muros es una señal de que los Estados Unidos tienen que agilizar su sistema de citas y sigue siendo para México un gran pendiente que resolver: la seguridad.