Por: Octavio Fabela Ballinas
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 21 DE SEPTIEMBRE DE 2023.- En lo que va de este año, al menos tres eventos masivos se han cancelado ante presuntas amenazas del crimen organizado en contra de cantantes de narcocorridos.
El primer caso ocurrió en febrero cuando Arturo González, auto apodado El Panter Bélico, fue amenazado de muerte con una manta colgada de un puente de la Zona del Río, si se presentaba en el estadio Chevron con su grupo Arriesgado.
Unos días antes de su presentación fueron disparados balazos durante una firma de autógrafos en un centro comercial en la zona Este y una estación de radio que promocionaba el concierto fue baleada y junto a su puerta dejaron una corona fúnebre.
Después, en abril habría un festival de narcocorridos en que actuaría grupo Marca Registrada, que también ha hecho carrera con letras que exaltan la figura de personajes dedicados al tráfico de drogas.
Amenazas de muerte en contra del líder y vocalista del grupo Marca Registrada provocaron que el espectáculo anunciado para el sábado 22 se pospusiera. A la fecha todavía no se ha re agendado.
El más reciente caso es el del cantante conocido como Peso Pluma; a este joven lo amenazaron de muerte con cuatro mantas que colgaron durante la madrugada del 12 de septiembre.
La empresa promotora del concierto decidió que no es seguro realizar el evento y canceló la presentación anunciada para el 14 de octubre en el estadio Caliente.
El común denominador de los artistas cancelados es que en sus letras exaltan los nombres de líderes del Cártel de Sinaloa y las mantas que los amenazaban de muerte tenían como firma las iniciales CJNG.
En una ciudad en la que este año han asesinado en promedio a cinco personas diariamente, las siglas CJNG han demostrado en tres ocasiones tener la fuerza de provocar el suficiente temor para que eventos masivos se cancelen o pospongan para mejor ocasión.
Para la realización de presentaciones artísticas no se veía el temor que ahora causaron varias mantas colgadas en los puentes de la ciudad, ni siquiera en los años en los que se disparó la violencia. En aquellos tiempos hubo conciertos hasta gratuitos sin ningún problema.
Aunque las autoridades lo nieguen hay un grupo criminal con la capacidad de decidir quién canta en Tijuana y quien no está aprobado para hacerlo. El tipo de canciones que interpretan los amenazados, ese ya es otro boleto.