Por: Octavio Fabela Ballinas
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 4 DE ENERO DE 2024.- En menos de tres días, hasta la tarde del miércoles 3 de enero, en la ciudad ya habían asesinado a 13 personas y herido a por lo menos seis.
En tanto, la autoridad se muestra más preocupada por otras cosas de carácter electoral.
Dos oficiales de la policía municipal heridos presuntamente por haber participado en el caso del robo de droga a mediados del mes de noviembre, en un domicilio ubicado sobre el bulevar Gato Bronco.
En lo que va del año, la presidenta municipal, Monserrat Caballero Ramírez, no ha tenido apariciones públicas, no pudo contener la quema de pirotecnia en año nuevo y en el arranque de 2024, su estrategia de seguridad sigue sin funcionar.
Ella y otros actores políticos inician el año preocupados por los asuntos electorales, difundiendo encuestas, pero sin concretar un verdadero programa que ayude a enfrentar el principal problema de la ciudad que es la inseguridad.
¿Cuál es la estrategia en materia de seguridad? ¿Cómo será el fortalecimiento de la policía municipal? ¿Por qué no han ayudado a la familia de la policía asesinada apenas el 6 de diciembre en el bulevar Insurgentes?
Ser candidata a la reelección, parece ser, por lo pronto, lo único que le interesa a la alcaldesa Monserrat Caballero, quien forma parte de un partido en el que los golpes en las espinillas, como se dice popularmente, están a la orden del día.
Se le olvida a la señora alcaldesa, que ella fue electa para gobernar tres años, que de los poco más de 24 meses ya desperdició seis haciendo campaña y que esa labor la distrae de la atención a los asuntos verdaderamente importantes para los ciudadanos.
La seguridad, no solamente en el número de homicidios, es la prioridad que reclamamos los que vivimos en la ciudad que gobierna.
