Libres los tres estudiantes de medicina detenidos por agentes de la FESC
La defensa pudo acreditar que no tenían posesión del arma de fuego y que los tiempos entre la detención y su entrega a la FGR fueron excesivos.
Por: Octavio Fabela Ballinas.
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 10 DE ABRIL DE 2024.- Richard Paul de 19 años, Mía de 18 y Ramón de 25, detenidos por oficiales de la Fuerza Estatal de Protección Ciudadana la tarde del martes 9 de abril, obtuvieron su libertad tras calificarse su aprehensión como ilegal.
Los jóvenes abandonaron las instalaciones de la Fiscalía General de la República (FGR) luego de que su defensa demostró que el arma de fuego que presentaron los agentes de la FESC nunca estuvo en posesión de los acusados.
Daniel Espinoza, abogado de uno de los jóvenes, explicó que además de demostrar que no portaban ningún arma, también se estableció que el tiempo que transcurrió desde la detención de los muchachos hasta que fueron puestos a disposición de la FGR no corresponde a lo que establece la normatividad.
Fidel Herrera, abogado de otro de los jóvenes, expuso que la detención se realizó fuera de cualquier protocolo de actuación. Dijo que la unidad que utilizaron las fuerzas estatales no puede ser identificada como una patrulla y que los muchachos se detuvieron hasta en tanto observaron un vehículo de la Policía Municipal.
Antes de la liberación de los jóvenes, el doctor Ricardo Ramos Félix, padre de uno de los detenidos, lamentó que las policías sigan actuando de manera corrupta como sucedió en gobiernos anteriores.
También dijo que los tres estudiantes detenidos simplemente habían salido de la escuela, donde más tarde presentarían un examen, a comer algo y que la distancia entre el local al que acudirían y el plantel es de apenas cinco cuadras, por lo que no es posible que viajaran a exceso de velocidad.
Aclaró que en la zona donde la autoridad asegura que los persiguió por pasarse una señal de alto no existen señalamientos horizontales ni semáforos lo que comprobó que es falsa la versión de los agentes, además de que el vehículo que intervino no tenía ningún tipo de balizaje y que las personas tenían el rostro cubierto con pasamontañas.
Aseguró que su hijo le informó que antes de ser llevado a las instalaciones de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana, los jóvenes fueron llevados a tres instalaciones distintas donde fueron torturados.