Por: Isabel Mercado.
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 25 DE ABRIL DE 2024.- Con una reserva de apenas mil 400 hectáreas urbanizables, Tijuana se quedará sin territorio para su desarrollo en menos de 10 años, advirtió Xavier Ibarra Quintana, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi).
La falta de espacio hacia donde extenderse, aunado al incremento en el precio de material, falta de servicios públicos y retiro de subsidios federales, encarece el costo de las propiedades en la zona, particularmente de la vivienda de interés social y propicia la edificación vertical.
De ahí que consideró importante que el gobierno del estado continúe con la planeación de la zona metropolitana que unirá a Tijuana con Tecate y Rosarito, lo que ampliará su reserva territorial a 165 mil hectáreas urbanizables.
Tijuana es la ciudad más poblada de México, habitada por más de 2 millones de personas, con un ritmo de crecimiento de 5% anual, lo que hace muy complicado llevarla a un desarrollo programado a 10 o 15 años con ese ritmo, por lo que consideró vital que trabajen de la mano gobierno, organismos de la sociedad civil y empresarios.
Expuso que, con el ritmo de crecimiento, la actual reserva de esta ciudad fronteriza podría ser de 10 años o menos, de ahí la necesidad de una mejor planeación y mayor coordinación entre los tres órdenes de gobierno, a través de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Comité de Planeación para el Desarrollo del Estado (Coplade) y el Instituto de Planeación Metropolitano (Implan).
De no lograrse en el corto plazo la unidad de los tres municipios en una zona metropolitana, a medida que se agote la poca reserva territorial que le queda a Tijuana se van a encarecer los costos de construcción en la localidad y, por ende, el precio de las propiedades.