Por: Adán Mondragón.
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 20 DE MAYO DE 2024.- En cuatro meses terminará la que quizá será la peor gestión municipal de un alcalde, en este caso alcaldesa al frente del Ayuntamiento de Tijuana y miren que ha habido bastante malitos.
La soberbia con la que todos los días se desplaza por la ciudad, no le deja ver la situación de inseguridad que se vive en el municipio más poblado del país.
A la alcaldesa se le hace mucha gracia declarar que los maleantes, los máximos maleantes viven en el Agua Caliente, en el edificio Adamant, en las zonas económicamente más empoderadas de la ciudad.
Es la jefa de la policía de Tijuana, si sabe donde viven los “maleantes”, por qué no pide cooperación al estado y/o la federación para realizar un operativo y capturar a esas personas.
Mientras la alcaldesa morenista se la pasa atacando desde su “mañanera” a quien se le ponga enfrente, en las calles de la ciudad la delincuencia sigue haciendo de las suyas.
Es mentira que los índices delictivos han disminuido en Tijuana, por el contrario estamos más inseguros que nunca, pero como su soberbia no la deja ver más allá de su nariz, no lo reconoce, no lo acepta.
Cada que le cuestionan el tema de la inseguridad la alcaldesa lo toma a juego, inventa cifras, tergiversa información, como lo hizo con las cifras del INEGI.
La gestión de la alcaldesa Monserrat Caballero ha sido una de las peores en la historia reciente de la ciudad; lástima la mujer Caballero Ramírez desaprovechó su oportunidad de poner en alto el nombre de la mujer en el servicio público.
Saludos a mis tres lectores, hasta la próxima…