Por Isabel Mercado
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 16 DE JULIO DE 2024.- Los hechos de violencia y la carga de impuestos al sector empresarial, son factores que inhiben la inversión y propicia una baja en la generación de empleos en el país, señaló Roberto Lyle Fritch, presidente del Consejo de Desarrollo de Tijuana (CDT).
Cuando ocurren situaciones de violencia como el crimen de la líder empresarial, Minerva Pérez Castro o de la joven Paola Andrea, se cae la ocupación hotelera.
Detalló que por los hechos violentos que trascendieron durante 2023, se perdió del 30 al 50 por ciento el nivel de ocupación en Valle de Guadalupe.
“Son cifras alarmantes”, expuso al indicar que ese índice se hizo del conocimiento de la gobernadora, Marina del Pilar Avila Olmeda y de las autoridades de seguridad pública.
Más que reclamo, el señalamiento se planteó para que se haga algo adicional, como incrementar los presupuestos en materia de seguridad, expuso.
“Hay mil 200 millones de pesos asignados a la seguridad (en Baja California), ese rubro se debe incrementar considerablemente”, anotó.
Agregó que en la entidad hace falta una academia de policía para la formación de elementos policiacos y reducir el déficit.
“Se tienen que adoptar acciones más contundentes si se quiere dar vuelta al problema de inseguridad”, declaró.
Además de la inseguridad, la carga que se ha generado últimamente al empresariado, también ha inhibido la inversión, muestra de ello es que solo en el mes de julio se perdieron 295 mil empleos y nada más se generaron 400 mil fuentes de trabajo, cuando se debería crear 1 millón 200 mil empleos al año, indicó.
Además del aumento al salario mínimo de un 356 por ciento, el incremento a gravámenes como el Impuesto Sobre Nómina (ISN) que subió un 43 por ciento el año pasado, representan cargas fiscales que afectan particularmente a las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes), expuso.
El presidente del CDT recordó que en México el 98 por ciento de las empresas son Mipymes.