CIERRE DE MERCADOS. Peso culmina la semana cotizando en 19.16 por dólar

Por: Grupo Molecular.

TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 02 DE AGOSTO DE 2024.- El peso cerró la semana con una depreciación de 3.77% o 69.6 centavos, cotizando alrededor de 19.16 pesos por dólar, con el tipo de cambio tocando un mínimo de 18.4166 y un máximo de 19.2146 pesos por dólar, nivel no visto desde el 20 de marzo del 2023.

Esta es la mayor depreciación semanal del peso desde la primera semana de junio, después de las elecciones en México. En las últimas tres semanas, el peso acumula una depreciación de 8.73% o 1 peso y 54 centavos.

La caída del peso en la semana se debió principalmente a los siguientes factores:

1. El fortalecimiento del yen japonés, lo que reduce el atractivo de mantener estrategias de carry trade a favor del peso mexicano. El yen japonés se apreció 4.66% en la semana, acumulando cinco semanas consecutivas de apreciación y avanzando 8.87% en ese periodo, tocando un mínimo de 146.42 yenes por dólar, su mejor nivel frente al dólar desde el 2 de febrero de este año.

El yen se fortaleció luego de que el martes por la noche el Banco de Japón subió la tasa de interés en 15 puntos base a 0.25% y anunció la reducción del programa de compra de bonos a un ritmo de 400 mil millones de yenes por trimestre, para bajar de 6 billones de yenes por mes en el primer trimestre del 2024 a 3 billones en el primer trimestre del 2026.

Además, se especula que el Banco de Japón podría seguir subiendo la tasa de interés en los próximos meses, permitiendo que el yen siga ganando terreno.

La apreciación del yen reduce el rendimiento esperado por carry trade, estrategia en donde los inversionistas adquirían deuda en yenes a baja tasa de interés para invertir en activos en pesos y recibir un mayor rendimiento. En consecuencia, en el mercado cambiario se redujo el atractivo para especular a favor del peso.

2. Aversión al riesgo por la publicación de indicadores económicos negativos en Estados Unidos. En julio la tasa de desempleo subió 0.2 puntos porcentuales a 4.3%, siendo la tasa más alta desde octubre del 2021, lo que se debió a un incremento de 352 mil en el número de desempleados, el mayor incremento mensual desde agosto del año pasado.

Con lo anterior, el número de desempleados ligó cuatro meses consecutivos de incrementos, algo que no sucedía desde el periodo entre marzo y junio del 2009, cuando Estados Unidos atravesaba la Gran Recesión.

Destaca que en julio el número de pluriempleados subió en 133 mil, ubicándose en 5.4% del total de trabajadores, no visto desde diciembre del 2023 y antes de esa fecha la mayor proporción desde septiembre del 2019.

Por otro lado, en la encuesta de los establecimientos, se crearon 114 mil posiciones laborales en julio, por debajo de las expectativas del mercado y siendo la menor creación de empleo desde abril.

Estos datos señslan un deterioro considerable del mercado laboral de Estados Unidos. Existe un indicador de recesiones conocido como la Regla de Sahm, que indica que la primera fase de una recesión ocurre cuando el promedio móvil de tres meses de la tasa de desempleo se ubica 0.50 puntos porcentuales por encima del promedio móvil de tres meses de la tasa de desempleo más baja en los 12 meses previos.

En julio esta diferencia fue de 0.53 puntos, superando por primera vez la medida de 0.50 puntos. Otra medida para pronosticar recesiones es cuando la tasa de desempleo supera su promedio móvil de 36 meses, algo que siempre ha precedido una recesión desde 1980. En julio, la tasa de desempleo suma tres meses consecutivos superando al promedio móvil de 36 meses.

El deterioro del mercado laboral no se ha reflejado en un menor crecimiento en Estados Unidos, pues está sostenido por: 1) la inversión fija que sube en años de elecciones, 2) el incremento del gasto de gobierno y 3) el crecimiento del consumo impulsado por el otorgamiento de crédito.

La depreciación del peso se debe a que México es el principal socio comercial de Estados Unidos.

3. La desaceleración económica de México. El martes por la mañana se publicó que el PIB de México creció 0.22% trimestral en el segundo trimestre del 2024. A tasa anual, el crecimiento fue de 1.09%, el más bajo desde el primer trimestre del 2021, mostrando una marcada desaceleración desde el crecimiento de 1.93% en el trimestre previo.

A tasa anual, las actividades primarias registraron una contracción de 2.23%, mientras que el resto de las actividades, a pesar de la desaceleración, siguen logrando crecimientos anuales. El sector secundario registró en el segundo trimestre un crecimiento anual de 0.48% mientras que el terciario creció 1.74% (ambos crecimientos siendo los más bajos desde el primer trimestre del 2021).

Por lo anterior, Grupo Financiero BASE recortó su estimación de crecimiento para el 2024 de 1.6% a 1.3%.

4. Elecciones en Venezuela. Al comienzo de la semana el peso mostró una depreciación luego de que en Venezuela el Consejo Nacional Electoral dio el triunfo a Nicolás Maduro, a pesar de que las actas y las encuestas daban el triunfo al candidato de la oposición, Edmundo González.

Aunque no existe una estrecha relación económica entre México y Venezuela, la inestabilidad política en Venezuela es suficiente para generar presiones al alza sobre el tipo de cambio peso-dólar, pues hay que recordar que el peso mexicano es la segunda divisa con mayor liquidez entre economías emergentes y la de mayor liquidez en América Latina, por lo que puede ser usada para especular ante escenarios de riesgo político en la región.

El dólar cerró la semana con un debilitamiento de 0.63% de acuerdo con el índice ponderado, pues el deterioro del mercado laboral de Estados Unidos fortalece la expectativa de recortes a la tasa de interés de la Reserva Federal.

En la canasta amplia de principales cruces, las divisas más apreciadas en la semana fueron: el yen japonés con 4.66%, el ringgit de Malasia con 3.45%, el franco suizo con 2.81%, la corona sueca con 2.24%, el won surcoreano con 1.69% y el dólar neozelandés con 1.30%. Las divisas más depreciadas en la semana fueron: el shekel israelí con 3.89%, el peso mexicano con 3.77%, el peso colombiano con 2.82%, el real brasileño con 1.15%, el florín húngaro con 1.12% y la lira turca con 0.86%.

La depreciación del shekel israelí se debe a que en la semana se incrementaron las tensiones en Medio Oriente, luego del asesinato del líder de Hamás, Ismail Haniyeh en territorio de Irán. Lo anterior ha ocasionado que Irán prometa represalias contra Israel, situación que podría ocasionar un escalamiento del conflicto.

El mercado de capitales cerró la semana con pérdidas generalizadas a nivel global. Esto se debió a: 1) la publicación de indicadores negativos en Estados Unidos, 2) el mal desempeño de varias emisoras del sector tecnológico en el segundo trimestre del año, resaltando Microsoft y Amazon y 3) nerviosismo de que el gobierno de Estados Unidos imponga mayores restricciones, principalmente en el sector de semiconductores, para evitar que China tenga acceso a tecnología estadounidense.

El Dow Jones registró una pérdida de 2.10%, cortando una racha de 4 semanas consecutivas de ganancias y siendo la peor pérdida desde la semana del 24 de mayo. El Nasdaq Composite cayó 3.35% en la semana, ligando 3 semanas consecutivas de pérdidas y cerrando en su menor nivel desde la última semana de mayo.

Es importante resaltar que el índice cerró 10.15% por debajo de su último máximo alcanzado el 11 de julio, entrando oficialmente en zona de corrección. Por su parte, el S&P 500 mostró una caída de 2.06% en la semana, la más profunda desde la semana del 19 de abril. El S&P 500 liga 3 semanas consecutivas de pérdidas y cerró en su menor nivel desde la última semana de mayo.

Al interior, destacan las pérdidas de los sectores: consumo discrecional (-4.28%), tecnologías de la información (-4.03%), energía (-3.74%), financiero (-3.02%) e industrial (-2.79%). A nivel emisoras, destacaron las pérdidas semanales de: Intel (-31.48%), Amazon (-8.00%), Broadcom (-5.15%), Nvidia (-5.12%) y Microsoft (-3.95%).

En Europa, el STOXX 600 registró una pérdida de 2.92%, la peor pérdida para una semana desde el 20 de octubre del año pasado y cerró en su menor nivel desde la primera semana de marzo de este año.

El DAX alemán mostró una caída de 4.11%, la más profunda desde el 17 de marzo del 2023 cuando comenzó el desorden bancario en Estados Unidos, llevando al índice a cerrar en su menor nivel desde la semana del 23 de febrero. Por su parte, el FTSE 100 cayó 1.34%, la más profunda desde el 19 de enero de este año.

En México, el IPC de la BMV cerró con una pérdida de 1.09% en la semana, ligando 3 semanas consecutivas de pérdidas y cerrando en su menor nivel desde la semana del 14 de junio. Al interior, destacaron las pérdidas de las emisoras: Grupo Elektra (-10.31%), Televisa (-7.45%), Becle (-6.43%), Orbia Advance (-5.36%), Kimberly-Clark (-4.73%), Alfa (-4.72%), Banorte (-4.51%) y Grupo Aeroportuario del Sureste (-4.50%).

La siguiente semana se publicará poca información económica en Estados Unidos, destacando el lunes 5 el ISM de servicios del mes de julio y el martes 6 la balanza comercial de mercancías de junio.

En México el martes 6 se publicará el registro automotriz de vehículos ligeros y el jueves 8 se publicará la inflación de julio. El jueves a las 13:00 horas se dará el anuncio de política monetaria del Banco de México, en el que se espera que mantenga sin cambios la tasa de interés ante el alza en la inflación.

En la semana, el euro tocó un mínimo de 1.0778 y un máximo de 1.0927 dólares por euro. La libra tocó un mínimo de 1.2707 y un máximo de 1.2888 dólares por libra. Por su parte, el tipo de cambio del euro con el peso tocó un mínimo de 19.9047 y un máximo de 20.9035 pesos por euro.

El WTI cerró la semana cotizando en 73.92 dólares por barril, perdiendo 4.20%, siendo la cuarta semana consecutiva a la baja, en las que acumuló una contracción de 11.11%. En la semana, el WTI tocó un máximo de 78.88 y un mínimo de 72.97 dólares por barril, no visto desde el 5 de junio. Las presiones a la baja para el precio del petróleo se debieron a:

1. Los riesgos de una menor demanda global ante la publicación de indicadores económicos débiles.

a. Los malos datos de empleo en Estados Unidos. La encuesta de los hogares mostró que en julio la tasa de desempleo aumentó de 4.1% a 4.3%, la mayor tasa desde octubre del 2021. El número de desempleados liga 4 meses consecutivos de incrementos, algo que no sucedía desde marzo a junio del 2009, cuando Estados Unidos se encontraba en medio de la Gran Recesión.

Por otro lado, en la encuesta de los establecimientos, la nómina no agrícola mostró la creación de 114 mil empleos, la menor creación para un mes desde abril de este año y ubicándose por debajo de la expectativa del mercado de 175 mil empleos.

b. El ISM manufacturero de Estados Unidos se ubicó en 46.8 puntos en julio, por debajo de la expectativa del mercado de 48.8 y ligando 4 meses consecutivos de caídas, algo que no sucedía desde el periodo de octubre del 2022 a enero del 2023 y ubicándose en su menor nivel desde noviembre del año pasado.

c. En China, el PMI manufacturero Caixin cayó a 49.8 puntos en julio, desde 51.8 puntos de junio, ubicándose por debajo del umbral de expansión de 50 unidades y en su menor nivel desde octubre del 2023. Lo anterior es una señal de que la manufactura en China se está contrayendo, desacelerando la actividad económica de ese país.

2. La expectativa de que la oferta de petróleo permanecerá amplia. En su reunión de seguimiento, la OPEP+ no señaló cambios en los planes para reactivar la producción de petróleo detenida en septiembre. El grupo no emitió ninguna recomendación específica tras la reunión, por lo que se espera agreguen 540 mil barriles diarios en el cuarto trimestre.

Las presiones a la baja fueron limitadas, luego del asesinato del líder de Hamas, Ismail Haniyeh, en un ataque realizado por Israel, en Teherán, la capital de Irán. El asesinato del líder de Hamas genera temores sobre posibles represalías por parte de Irán contra Israel.

Irán es un importante país productor de petróleo, por lo que la posibilidad de que ese país se vea obligado a entrar en el conflicto armado elevó los riesgos de una menor oferta de petróleo.

Asimismo, los metales industriales cerraron la semana con pérdidas, ante los riesgos de una menor demanda en China y Estados Unidos, lo que llevó al precio del cobre a caer 0.68% en la semana y cerrar cotizando en 8,933.85 dólares por tonelada métrica. En la semana el cobre alcanzó un mínimo de 8,800 dólares, no visto desde el 28 de marzo.

En 10 de las últimas 11 semanas el precio del cobre ha acumulado una caída de 15.70%, mientras que desde el máximo anual de 10,900 dólares hasta el cierre de la sesión el precio del cobre ha caído 18.04%.

El precio del aluminio cayó 1.11% a 2,263.5 dólares por tonelada métrica, mientras que el zinc cayó 0.60%, a 2,653 dólares por tonelada métrica. El aluminio tocó un mínimo de 2,209.5 dólares, no visto desde el 1 de marzo y el zinc un mínimo de 2,615 dólares, no visto desde el 7 de abril.

El aluminio acumula 4 semanas consecutivas de pérdidas, cayendo 10.73%, mientras que desde su máximo anual de 2,799 dólares por tonelada hasta el cierre de hoy ha caído 19.13%. Por su parte, el zinc acumula 4 semanas consecutivas de pérdidas, cayendo 11.60%, mientras que de su máximo anual de 3,185 dólares por tonelada hasta el cierre de hoy ha caído 16.70%.

Por su parte, el precio del oro cerró la semana ganando 2.11%, cotizando en 2,437.58 dólares por onza. En la semana, el oro tocó un máximo de 2,477.68 dólares, acercándose al máximo histórico de 2,483.73 dólares por tonelada métrica.

Las presiones al alza se debieron al debilitamiento del dólar estadounidense de 0.63%, de acuerdo con el índice ponderado y ante la expectativa de menores tasas de interés a nivel global. Se espera que la Reserva Federal realice dos recortes a la tasa de interés este año iniciando en septiembre.

El debilitamiento del dólar y la expectativa de menores tasas aumentan la demanda por commodities al hacerlos más accesibles para inversionistas que tienen otras divisas y al reducir los costos de oportunidad de mantener inversiones en materias primas que no pagan intereses.

Finalmente, los commodities agrícolas cerraron la semana con resultados mixtos, con el precio del maíz y la soya perdiendo 1.52% y 1.86%, respectivamente, cotizando en 4.03 y 10.27 dólares por bushel. En la semana, el maíz tocó un mínimo de 3.95 dólares y la soya tocó un mínimo de 10.13 dólares por bushel, no vistos desde el 2 de noviembre del 2020. Las presiones a la baja se debieron a:

1. Una caída en las exportaciones netas de maíz de 18.38% a 878.70 mil toneladas métricas, de acuerdo con el Departamento de Agricultura de Unidos (USDA, por sus siglas en inglés).

2. Una mejora en las condiciones del clima en Estados Unidos, que podrían incrementar los rendimientos de las cosechas.

Por el contrario, el precio del trigo cerró la semana ganando 3.20% a 5.36 dólares por bushel, luego de tocar un mínimo de 5.14 dólares por bushel, no visto desde el 18 de agosto del 2020. Las presiones al alza se debieron a que se temen daños en las cosechas en la región del Mar Negro.

Por su parte, en Francia se espera que la cosecha del trigo blando sea menor a la del año previo ante las fuertes lluvias. Asimismo, se espera una mayor demanda de China, país que está aumentando las compras estatales de trigo para respaldar los precios locales.

ORÁCULO FINANCIERO. Peso supera la barrera de los 19 por dólar

El peso inicia la sesión con una depreciación de 0.98% o 18.6 centavos, cotizando alrededor de 19.05 pesos por dólar, con el tipo de cambio tocando un mínimo de 18.8523 y un máximo de 19.2146 pesos por dólar, nivel no visto desde el 20 de marzo del 2023.

Con lo anterior, el peso se ubica como la divisa más depreciada en la canasta amplia de principales cruces.

La depreciación del peso se debe a que en Estados Unidos el reporte de empleo mostró un claro deterioro del mercado laboral en julio, elevando la especulación de que la economía de ese país comenzó a desacelerarse con fuerza a partir del tercer trimestre. El peso mexicano fue la divisa más depreciada tras la publicación del reporte, debido a que México es el principal socio comercial de Estados Unidos.

La encuesta de los hogares mostró que en julio la tasa de desempleo aumentó de 4.1% a 4.3%, la mayor tasa desde octubre del 2021. Esto se debe a un incremento de 352 mil en el número total de personas desempleadas en julio, el mayor crecimiento desde agosto del año pasado.

Es importante resaltar que el número de desempleados liga 4 meses consecutivos de incrementos, algo que no sucedía desde marzo a junio del 2009, cuando Estados Unidos se encontraba en medio de la Gran Recesión. Por su parte, la tasa de subocupación mostró un incremento de 0.4 puntos porcentuales respecto al dato de junio, el mayor incremento desde agosto del año pasado para ubicarse en 7.8%, su mayor nivel desde octubre del 2021.

También se observó un incremento de 133 mil en el número de personas pluriempleadas, con lo que el porcentaje de pluriempleados sobre el total de los trabajadores se ubicó en 5.3%, empatando con el dato de diciembre del 2023, su mayor nivel desde septiembre del 2019.

Por otro lado, en la encuesta de los establecimientos, la nómina no agrícola mostró la creación de 114 mil empleos, la menor creación para un mes desde abril de este año y se ubicándose por debajo de la expectativa del mercado de 175 mil empleos.

Asimismo, las creaciones de empleo de los dos meses previos fueron revisados a la baja: en mayo se revisó de 218 mil a 216 mil empleos creados y en junio también se revisó a la baja de 206 mil a 179 mil, siendo un total de 29 mil empleos revisados a la baja. En total en el año, se han revisado un total de 279 mil empleos a la baja, es decir, un promedio de 46.5 mil empleos por mes.

Destaca el sector privado que mostró la creación de 97 mil posiciones laborales, la menor para un mes desde marzo del año pasado. Por otro lado, el sector público mostró una creación de solamente 17 mil posiciones laborales.

Finalmente, el salario promedio por hora creció 0.23%, ligeramente por debajo de las expectativas del mercado de 0.28%. A tasa anual, se ubicó en 3.63%, ligando 2 meses consecutivos de desaceleraciones y ubicándose en su menor nivel desde mayo del 2021.

En el mercado cambiario la mayoría de las divisas ganan terreno, ocasionando que el dólar pierda 0.59% de acuerdo con el índice ponderado, pues el deterioro del empleo en Estados Unidos fortalece la expectativa de que la Reserva Federal comenzará a recortar la tasa de interés el 18 de septiembre.

Las divisas más apreciadas hoy son: el ringgit de Malasia con 1.61%, el yen japonés con 1.34%, el zloty polaco con 1.20%, la corona sueca con 1.09%, la corona checa con 1.06%, el franco suizo con 1.04% y el euro con 0.91%. Las divisas más depreciadas hoy son: el peso mexicano con 0.98%, la lira truca con 0.20%, el peso chileno con 0.19%, el dólar taiwanés con 0.19% y el real brasileño con 0.08%.

En el mercado de dinero, la tasa de las notas del Tesoro a 10 años muestra una disminución de 12.4 puntos base, ubicándose en 3.85% y tocando un mínimo de 3.7866%, no visto desde el 27 de diciembre del 2023. Con esto, la tasa muestra una tendencia a la baja por siete sesiones consecutivas, acumulando una disminución de 43.1 puntos base.

La disminución de la tasa en el mercado secundario está asociada a la expectativa de recortes a la tasa de interés de la Reserva Federal y al miedo por la desaceleración económico. Cabe recordar que existe una relación inversa entre la tasa y el precio de un bono, por lo que la menor tasa implica un mayor precio ante el incremento de la demanda como refugio.

El miedo es más evidente en el mercado de capitales. Desde la sesión asiática, el Nikkei japonés registró una pérdida de 5.81%, la más profunda desde el 13 de marzo del 2020 cuando comenzó la pandemia. Esto se debió a: 1) la publicación de malos indicadores económicos en Estados Unidos (previo al reporte de empleo), 2) el desempeño de las emisoras del sector tecnológico por el riesgo de restricciones de Estados Unidos y por resultados negativos de algunas emisoras de este sector y 3) el aumento en la tasa de interés del Banco de Japón, junto con la expectativa de que podría seguir subiendo.

En cuanto a los demás índices de Asia, el Hang Seng de Hong Kong registró una caída de 2.08%, la más profunda desde el 21 de mayo de este año y cerrando en su menor nivel desde el 23 de abril. Por su parte, el CSI 300 de Shanghái perdió 1.02% en la sesión, cayendo en 4 de las últimas 5 sesiones.

En Europa, el STOXX 600 muestra una pérdida de 1.99%, el DAX alemán cae 1.78%, el CAC 40 francés pierde 0.93% y el FTSE 100 de Londres muestra una caída de 0.61%. Los mercados en Europa siguen abiertos, por lo que están afectados por la publicación del reporte de empleo de Estados Unidos.

En Estados Unidos, el Dow Jones registra una pérdida de 1.16%, el Nasdaq cae 2.47% y el S&P 500 pierde 1.62%.

Las pérdidas también se extienden al mercado de materias primas. El WTI se perfila para cerrar la semana con una caída superior al 4.1%, al cotizar en 73.9 dólares por barril. Esta es la cuarta semana consecutiva en la que el precio del petróleo cae, acumulando una pérdida de 10.88% en ese periodo.

Además de los malos datos de empleo en Estados Unidos, las presiones a la baja se deben a que persisten las preocupaciones sobre la demanda de China. Cabe destacar que, en China, el PMI manufacturero Caixin cayó a 49.8 puntos en julio, desde 51.8 puntos de junio, ubicándose en su menor nivel desde octubre del 2023.

En cuanto a indicadores económicos, en México se publicó el indicador de Inversión Fija Bruta (IFB) correspondiente a mayo del 2024, que registró un crecimiento mensual de 0.71% de acuerdo con series ajustadas por estacionalidad, acumulando cinco meses consecutivos de incrementos mensuales.

A tasa anual, el indicador muestra una clara desaceleración, al mostrar un crecimiento de 5.58%, la menor tasa desde agosto del 2022. En el acumulado de los primeros cinco meses del año, el indicador muestra un alza de 10.16%.

El crecimiento de la inversión fija bruta en mayo se debió principalmente a la inversión en construcción con un crecimiento mensual de 2.37%, impulsado a su vez por la inversión en construcción residencial con un crecimiento mensual de 6.62%. Con lo anterior, la construcción acumula tres meses consecutivos de crecimiento a tasa mensual y registra un crecimiento anual de 9.15%.

No obstante, se observa debilidad en la construcción no residencial, que se contrajo 0.20% mensual y cuya tasa anual mostró una marcada desaceleración desde 19.18% anual en abril a 7.65% anual en mayo, la menor desde enero del 2023.

En contraste con la construcción, la inversión en maquinaria y equipo se contrajo 1.26% mensual, cayendo por segundo mes consecutivo, con contracciones en maquinaria y equipo nacional (-0.49%) e importado (-1.60%). A tasa anual, la inversión en maquinaria y equipo se desaceleró a 2.06% en mayo desde 5.05% en abril, siendo la menor tasa de crecimiento anual desde febrero del 2021.

Por su parte, el Indicador Mensual de Consumo Privado mostró nuevamente un desempeño negativo. En mayo registró una contracción mensual de 0.37%, acumulando dos meses consecutivos de retroceso. Cabe destacar que el consumo no caía por dos meses consecutivos desde febrero y marzo del 2023.