Por: RedacciónE32.
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 20 DE NOVIEMBRE DE 2024.- La Dirección Municipal de Protección Civil de Tijuana, emitió a la población una serie de recomendaciones para evitar casos de intoxicación por monóxido de carbono.
Dicho tipo de monóxido, conocido también como el “asesino silencioso”, es un gas que no presenta olor, color y se produce por un proceso simple como lo es la mala combustión del gas natural.
Durante la temporada invernal, los incidentes de intoxicación por esta causa ocurren con mayor frecuencia y lamentablemente, en la última semana los cuerpos de emergencia han atendido varios hechos por esta causa, donde hubo pérdidas humanas.
En este sentido, la Dirección Municipal de Protección Civil recomienda:
● Apagar la estufa de leña, calentón de gas o eléctrico antes de ir a dormir o al salir de casa.
● Ventilar la casa, abriendo las ventanas por lo menos 15 centímetros.
● Antes de utilizar el calentón de gas, revisar las condiciones del aparato y su correcta instalación.
● Afianzar que el tubo de escape se dirija hacia el exterior.
● Verificar que la llave de paso abra y cierre correctamente.
● Confirmar que la llama de gas sea azul. Si es amarilla o naranja, puede haber presencia de monóxido de carbono.
● Asegurarse de que la tubería no tenga fugas de gas.
● Si se desconoce su funcionamiento, consultar a un técnico especializado para descartar fallas.
Es importante que la comunidad este al pendiente de su entorno al momento de utilizar aparatos como calentones de gas en sus viviendas, y evitar así cualquier situación que ponga en riesgo a los habitantes.
Algunos de los síntomas de intoxicación por monóxido de carbono son: dolores de cabeza, mareos, falta de aire, náusea/ vómitos, debilidad, somnolencia, pérdida de conocimiento/ convulsiones, palpitaciones, dolor de pecho; y en casos muy graves, la muerte.
Si se ha detectado la intoxicación, es importante seguir las siguientes indicaciones: abrir puertas y ventanas para ventilar, retirarse o retirar a la víctima del lugar contaminado a un lugar con aire fresco, llevar a la víctima al hospital más próximo aunque haya recuperado el conocimiento. Una vez allí, informar al equipo médico sobre el antecedente de exposición a gases de combustión.