Por: Adán Mondragón.
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 05 DE NOVIEMBRE DE 2024.- Son pocos los días en los que ocurren hechos de relevancia nacional y para nuestro país este cinco de noviembre serán dos sucesos los que repercutirán nuestra vida nacional y la relación binacional con la Unión Americana.
En un primer momento, los once ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) van a discutir el proyecto del ministro Juan Luis González Alcántara Carranza respecto a la reforma al Poder Judicial.
Todo hace indicar que sea cual sea el resultado de la votación de los once ministros, el poder Ejecutivo, así como el Legislativo, harán caso omiso (como ya lo han hecho) de la resolución de la SCJN.
Es casi un hecho que MORENA y sus aliados van a continuar destruyendo lo que queda de las instituciones de los Estados Unidos Mexicanos y su democracia, ya con el Poder Judicial en sus manos, todo será más fácil.
La reforma al Poder Judicial no fue pensada para acabar con la corrupción, sino para someterla y tenerla bajo control con jueces y ministros a modo, con 90 % lealtad y 10% capacidad.
La elección de los Estados Unidos de América.
El segundo de los sucesos del que tenemos que estar muy pendientes es la elección del nuevo presidente de los Estados Unidos de América, entre la demócrata Kamala Harris y el republicano Donald Trump.
La contienda está muy pareja y según los analistas más enterados de la situación pronostican una ligera ventaja para Donald Trump entre el voto popular.
Bueno, aquí hay que recordar que para ser presidente de los Estados Unidos no basta con ganar en el voto popular, se triunfa con el voto del colegio electoral (538 en total) los votos que se otorgan por estado.
De tal forma que el republicano Donald Trump o la demócrata Kamala Harris, deberán obtener más de 270 votos del colegio electoral para ganar la contienda.
Los expertos en la materia advierten que a México no le conviene el triunfo de ninguno de los dos candidatos, otros dicen que más vale viejo por conocido que nuevo por conocer, pero a ver con cuál nos va menos peor.
El tercer informe de gobierno de Marina del Pilar
El primero de noviembre, la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, recién cumplió su tercer año de gobierno al frente de la gubernatura bajacaliforniana.
De entrada, la mandataria estatal tiene pendientes en el tema de la seguridad y de la transparencia, los resultados en estos rubros han sido mínimos.
Con todo y la creación de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del estado, la disminución de la incidencia delictiva ha sido casi imperceptible.
Van dos titulares en esa secretaría, el general Gilberto Landeros Briceño y Leopoldo Tizoc Aguilar Durán, sin embargo, la estrategia trazada desde la Federación parece que continúa siendo la de “abrazos, no balazos”, impulsada por YSQ.
En la Fiscalía General del Estado (FGEBC) también hay muy poco que presumir, también han pasado dos titulares en esta dependencia, Ricardo Iván Carpio Sánchez y la actual, María Elena Andrade Ramírez, los resultados siguen siendo los mismos, pocos asesinatos se resuelven y por tanto pocos son los homicidas sentenciados.
En el rubro de transparencia mejor no hablamos, el sistema estatal anticorrupción lleva por lo menos cinco años sin funcionar a plenitud.
Los políticos, sea de la fuerza política que sea, morenistas, panistas, priistas, prefieren la opacidad, castigan la corrupción solo cuando la comete algún enemigo político.
Sin embargo, cuando la falta es de algún aliado, la perdonan y la esconden, si no lo creen échenle un vistazo a la revisión de las cuentas públicas.
Saludos a mis tres lectores, hasta la próxima…