Con todo respeto. Protección Civil, somos todos

Por Lourdes Loza Romero

TIJUANA, BAJA CALIFORNIA A 15 DE NOVIEMBRE DE 2022.- El lema nacional reza “Protección Civil Somos Todos”, con la intención de hacer partícipe a la ciudadanía en materia de prevención de riesgos, siendo que la autoridad se resguarda en esto para limpiar sus responsabilidades en la misma materia que politiza sin razón.

Se sabe que en cada cambio de administración, quien ocupe el cargo de director o coordinador de Protección Civil a nivel estatal y municipal (incluso a nivel nacional), será una persona con peso político dentro del gabinete o mínimo un personaje que desde antes de la campaña electoral mostró lealtad al partido o al político líder, muy por encima de su formación o experiencia en la materia.

La semana pasada, unas lluvias “atípicas” cobraron la vida de dos jóvenes tijuanenses que fueron arrastrados por una corriente de agua en la colonia Obrera. Los hermanos Miranda estaban a nada de lograr salvaguardarse en su hogar luego de que el mayor fuera a recoger a su hermana de 16 años a la escuela en la zona de Otay, cuando el vehículo familiar terminó en el desarenador del Cañón del Pato.

Mientras los rescatistas buscaban a Hugo y a Rebeca, se comenzó la cacería de los posibles culpables de esta situación. Por horas hubo un silencio por parte de las autoridades y hasta que se desbordó la situación comenzaron a fluir los anuncios, las recomendaciones y la esperada suspensión de actividades escolares.

En el mar del desconocimiento, la ciudadanía se fue en contra de Protección Civil Municipal por creer que la dependencia tiene la facultad de suspender las clases. Si Protección Civil hubiera suspendido las clases, Hugo y Rebeca no hubieran tenido la necesidad de salir de sus hogares. Pero se nos olvida que es la Secretaría de Educación Pública la que baja la instrucción de la suspensión, siguiendo las recomendación de la primera instancia, en el caso de los centros educativos en los que estudiaban los hermanos la responsabilidad recae a nivel estatal.

Por su parte, las autoridades municipales hicieron una campaña en la que tanto sus funcionarios como los medios afines señalaron a la ciudadanía como responsable del caos ocurrido por las lluvias, como si el solo hecho de tirar basura en la calle lo hubiera provocado.

Ya en la desesperación por recuperar la simpatía de la ciudadanía, este martes se anunció el cambio de titular en la dirección de Protección Civil Municipal. Cambian a Bernardo Villegas por Aroldo Rentería, quien hasta unas horas antes de tomar protesta era el encargado de la misma dependencia pero en Playas de Rosarito.

Aquí, dejamos de ser “todos” los responsables de la Protección Civil. Lejos de ser una solución, agrava más el problema. Uno de los grandes errores de este gobierno es continuar politizando un tema que es tan delicado, después de la seguridad pública y la salud.

Siguen anteponiendo la afiliación política, que en el caso de Rentería hay suficiente evidencia de que la suya va pegada al partido en el poder, y la experiencia y formación ni siquiera figuran en los requisitos para elegir al nuevo funcionario.

También hay que prestar atención al detalle que no es el único político exportado de Playas de Rosarito, pues el propio Paul Corona fue titular de la Canirac de ese municipio y presidente del Patronato Pro Bomberos de allá.

Otro error de este (y todos los gobiernos en general) es no invertir en la difusión de la prevención, a pesar de tener redes sociales suficientes para transmitir las recomendaciones de la dependencia a la ciudadanía, prefieren usarlas para replicar la propaganda política como si no fueran suficientes las propias redes sociales de la alcaldesa y del Ayuntamiento.

No se sabe si esto sea a propósito, como poniéndole el pie a Villegas, pues de buena fuente sé que para subir una infografía con recomendaciones se debe obtener la autorización del encargado de redes sociales del propio Ayuntamiento, que parece dejar este material a último momento, sin importar que el personal de la dependencia cumpla con entregarlos a tiempo.

Tampoco quiero dejar de mencionar que Protección Civil de Tijuana es una de las dependencias municipales que recibe menos de 15 millones de pesos como presupuesto de egresos, el cual ha tenido muy pocos incrementos en los últimos cinco años.

Para finalizar, quiero destacar que Villegas cuenta con una larga trayectoria en la atención de emergencias de la ciudad como bombero y ha sido asesor en temas de prevención del riesgo también por muchos años, no se doblegó ante una afinidad política y durante un año se dedicó a mantener a flote un barco poco entendido por quien ocupa la silla de Presidencia. Hasta que ocurrió la desgracia de las lluvias atípicas, y al carecer de poder político, fue la primera (y tal vez única) cabeza que rodó en el municipio.