Por Octavio Fabela
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA A 2 DE FEBRERO DE 2023.- El viernes 27 de enero, la familia de Jesús Eduardo viajaba a Veracruz, unas horas antes les avisaron que el abuelo del muchacho había fallecido, el joven de apenas 17 años no acudió porque tenía que trabajar en el puesto de tacos de un vecino.
Era temprano cuando sujetos, que ya habían acudido anteriormente, llegaron para exigirle el pago de una cuota para dejarlo vender en la esquina de la Unidad Deportiva de la colonia Las Huertas.
Tres balazos cegaron la vida de Jesús Eduardo que trabajaba para ayudar a los gastos de la casa mientras esperaba el día de regresar a la preparatoria que estaba estudiando, era apenas su tercer día de labores.
Eduardo murió víctima de criminales que se dedican al cobro de piso en la colonia Las Huertas, en el Infonavit Latinos y la colonia Reforma, asesinos que operan una red que comete un delito que la autoridad se niega a reconocer.
El joven de 17 años forma parte de la estadística de 153 personas asesinadas durante el mes de enero en la ciudad. No era, como dice las autoridades, alguien dedicado o relacionado con la venta de drogas al menudeo.
Según han reiterado desde la Fiscalía General del Estado, en Tijuana no se comete el delito de cobro de piso porque no hay denuncias, pero diario cientos de pequeños comerciantes son víctimas y no se hace nada por ayudarlos.
Jesús Eduardo ya no podrá acudir ante la autoridad a presentar la denuncia, pero quienes le quitaron la vida seguirán exigiendo dinero a los comerciantes de Las Huertas, quienes tampoco los denunciarán por miedo a correr la misma suerte que él.
Y porque no se animarán a denunciarlos, la autoridad seguirá negando que esas cosas suceden y probablemente más personas que no tienen ninguna relación con la venta de drogas al menudeo seguirán perdiendo la vida.
Descansa en paz Jesús Eduardo.