Por: Isabel Mercado.
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, A 20 DE AGOSTO DE 2024.- California y Baja California deben coordinarse en la creación de infraestructura que facilite la transición en electromovilidad, indicó Israel Delgado Vallejo, vicepresidente en la región Noroeste de la Cámara Nacional de Autotransporte de Carga (Canacar).
A menos de dos años que en California entre en vigor la nueva ley que obligará al uso de camiones de carga eléctricos, el sector transportista tiene más preguntas que respuestas de cómo va a afrontar el reto que significa el uso de unidades de nueva generación.
El primer obstáculo que observó para la transición energética fue la falta de financiamiento para la adquisición de camiones eléctricos.
En segundo término, enumeró la marcada escasez de infraestructura para la carga de energía eléctrica.
Ambos puntos, subrayó, ponen en desventaja a los transportistas mexicanos frente a los de California, único estado americano que cuenta con una ley de electromovilidad.
La nueva reglamentación entrará en vigor en 2025 de manera gradual hasta 2030, pero a la fecha, del lado mexicano, hay un marcado retraso en la instalación de una red eléctrica que permita la operación de centros de carga en puntos estratégicos.
Con la infraestructura actual, las unidades apenas podrían llegar a San Luis Río Colorado, dijo.
Los tiempos de carga de los camiones eléctricos es otro obstáculo que observó, ya que en una ruta hacia Nueva York, por ejemplo, tendrían que parar 18 veces para recargar batería durante un promedio de 5 a 6 horas, cuando con el sistema actual el tiempo de carga de combustible es de 30 minutos.
Esto será un problema porque incrementará el tiempo de traslado, advirtió.
“Para nosotros los camiones eléctricos no serán una opción en distancias largas”, concluyó.