Con todo respeto. ¿Dónde está Diana?

Por Lourdes Loza Romero

TIJUANA, BAJA CALIFORNIA A 22 DE NOVIEMBRE DE 2022.- Varios alumnos de la preparatoria federal Lázaro Cárdenas vieron a Diana Piggeonountt, de quince años de edad, abandonar el plantel escolar por última vez el 8 de junio de 2018.

A los días, mientras se aplicaban las pesquisas para tratar de localizarla, se reveló que mantenía una relación sentimental con Juan Manuel De Mateo Uribe, un hombre dedicado al oficio de taxista que era once años mayor que ella.

La joven les compartió a sus amigos los detalles de esa relación, los cuales fueron suficientes para señalarlo como un sospechoso, porque todos habían sido testigos de que esa mañana Diana trataba de localizarlo para arreglar un “problema”, se presume que la menor creía estar embarazada y el hombre la evadía.

Juan Manuel negó todo y por dos años se escondió bajo una coartada que armó con violencia, tenía otra pareja sentimental y a esta le pidió con amenazas que respaldara su versión de los hechos, de lo cual después la mujer se retractó y las investigaciones de la Fiscalía General del Estado se centraron en él.

El primer avance de este caso ocurrió dos años después de la desaparición de Diana, cuando en 2020 se logró la captura de Juan Manuel. En esas fechas los compañeros y amigos de la adolescente se graduaban de la preparatoria, mientras prevalecía la incógnita: ¿dónde está Diana? 

Esta semana las autoridades informaron que, luego de un proceso penal de dos años que el propio Juan Manuel decidió concluir con un debate de juicio oral, se le declaró culpable de la desaparición de la adolescente dejando pendiente definir la cantidad de años que tendrá que pasar en la cárcel por este delito. Con esto se asume que aún le están dando oportunidad para que brinde los datos necesarios para localizar a Diana, de lo contrario podría pasar más de 50 años en prisión.

Para algunas colectivas feministas, esta “oportunidad” que le dan a un agresor es más un problema que una solución. Mientras por un lado hay casos como el de Alina, la mujer policía que asesinó a su pareja en defensa propia y que fue sentencia sin perspectiva de género, por el otro hay procesos en los que a los hombres se les da la oportunidad de negociar, de reducirles la pena a cambio de que acepten su culpabilidad o den información.

En lo personal, me costaba trabajo creer que esto era un acto machista, si al final unos cuantos aceptaban su culpabilidad para pasar varios años en prisión. Pero desde hace cuatro años las autoridades tienen a su disposición a un hombre que desapareció a una joven, que apenas empezaba su camino, que tenía sueños y planes a futuro, sin lograr que de información sobre su paradero y sin brindar ni justicia ni paz a la familia de la adolescente.

Mañana será la audiencia donde se defina la condena de Juan Manuel y también se sabrá si aprovechó la “oportunidad” que le dieron para decir donde está Diana. Un día antes del Día Naranja, como se le conoce al Día Internacional de la Eliminación de la Violenta contra Mujeres.