Por: Grupo Molecular
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA A 03 DE SEPTIEMBRE DE 2022.- En 2016 el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) reportó que 46.6% estaba en pobreza y 7.6% en pobreza extrema. ¿Qué definimos por pobreza?
En México ser pobre significa tener ingresos de dos mil pesos mensuales y no tener cubiertos dos de los derechos básicos tales como la alimentación, educación, salud, seguridad social y vivienda. Mientras que la pobreza extrema es un porcentaje que está dentro de la pobreza y tienen un ingreso menor a mil quinientos mensuales y tiene tres carencias.
La manera en que se compara con los demás países es que aquí y en China se necesitan los nutrientes indispensables para existir, por lo tanto, se diseña la canasta básica. Si una persona no tiene el ingreso suficiente para cubrir el precio de la canasta básica, entonces se la llama pobreza, claramente cada país tiene variaciones.
México añadió como medición los derechos básicos no monetarios para medir la pobreza. Sin embargo, medirla es una tarea compleja y complicada para cada país porque necesita ser rigurosa y transparente.
La pobreza no se puede cambiar porque un mandatario lo diga, el resultado de la pobreza es por medición pública y por programas de la CONEVAL y del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI).
El ingreso per cápita en el país lleva estancado una a dos décadas, lo cual se refleja en el crecimiento del país y la distribución, incrementar el ingreso es una tarea difícil de realizar porque no va depender de solo querer hacerlo y decirlo, sino en el trabajo del ciclo económico y sus variantes.
Lo que sí puede hacer el gobierno es brindar programas de ayuda que mejoren los derechos básicos medibles. Por ejemplo, con el paso del tiempo el ingreso no ha mejorado, pero la cobertura en la educación, calidad de las viviendas, acercamiento a la salud, sí.
¿Se puede eliminar la pobreza extrema? Es completamente posible. Pero como primer paso es reconocer que se necesitan más recursos y México es un país con poca captación y muchas deudas. Se necesitan recursos fiscales sostenibles y que no dañen a los pobres. Esto quiere decir que, al exigir impuestos sin una buena planeación, puede sacar a un pobre de pobreza extrema, pero meter a dos o más en este rublo.
Estos fueron comentarios que realizaron Gonzalo Hernández de CONEVAL y con John Scott del CIDE en una entrevista.
